lunes, 28 de diciembre de 2020

Introducción a la Creatividad. Parte II - Dr. Osvaldo Retondaro

En este post continúo desarrollando los Principios Introductorios a la Creatividad.

En cada apartado se proponen una serie de Actividades. Si quieres que comentemos tus propuestas te invito que las remitas a mi correo electrónico: osvaldojretondaro@gmail.com

 

Indice temático:

 

1.    Las cuatro “P” de la creatividad.

 

1.1.  Personas. Personalidades creativas, la importancia de la apertura a las   nuevas experiencias. Niveles del conocimiento -codificado y tácito-. Grado de motivación interna.

1.2.   Procesos. Etapas del proceso creativo. La creatividad como formulación novedosa de los problemas. Pensamiento divergente y convergente.

1.3.   Plazas. Entornos favorables a la creatividad. Organizaciones creativas. Ciudades creativas.

1.4.   Productos. características y niveles.

 

 

 

1.    Las cuatro “P” de la creatividad.

En esta sección del módulo analizaremos los cuatro principales componentes de la creatividad, denominados las cuatro “P” de la creatividad: productos, procesos, personas y plazas -éste último involucra a los entornos desde organizacionales hasta sociales que mejor promueven el desarrollo de la creatividad-.

Te propongo la visualización del video: Las cuatro “P” de la creatividad, disponible en mi canal youtube desde el 15 de diciembre de 2020

 

1.1.   Personas.

Desde hace varias décadas, se han realizado una gran cantidad de estudios para definir la personalidad que caracteriza a los individuos creativos. En esta sección se presentarán las características de las personas creativas, con el tratamiento de los siguientes tres temas:

  • Personalidades creativas, la importancia de la apertura a las nuevas experiencias.
  • Niveles del conocimiento -codificado y tácito-.
  • Grado de motivación interna.

Personalidades creativas, la importancia de la apertura a las nuevas experiencias.

Dentro de la gran cantidad de trabajos realizados citaremos a Gowan, Demos y Torrance quienes elaboraron una lista de rasgos de personalidad de individuos que actúan libremente y en forma creativa:

 

  • Curiosidad y espíritu inquisitivo.
  • Originalidad de pensamiento y de acción.
  • Independencia de obra y pensamiento.
  • Fértil imaginación; inconformismo.
  • Captación de relaciones desapercibidas para otros.
  • Fluidez de palabras y acciones.
  • Constancia en sus acciones.
  • Aprecio por la complejidad.

Dada la cantidad de investigaciones realizadas sobre este tema, se han observado soluciones contradictorias. Por ejemplo, la relativa al grado de neurosis registrado y la creatividad de la persona. Para los psicólogos humanistas como A. Maslow el equilibrio mental es un requisito para la autorrealización y la creatividad. Mientras otros estudios han evidenciado un mayor grado de neurosis en los artistas creativos y no así en otras áreas de dominio de la creatividad, como es el caso de los emprendedores o los científicos.

Diversos analistas han compilado las investigaciones sobre el tema con la finalidad de establecer las características comunes presentes en los diferentes trabajos. Según la revisión temática realizada por M. Romo, M.J. Sánchez-Ruiz y V. Alfonso-Benlliure (2017), la apertura a las nuevas experiencias es la variable más relevante en los perfiles de la personalidad creativa.

Te propongo realices una atenta lectura del trabajo “Creatividad y personalidad a través de dominios: una revisión crítica” de los autores antes citados y efectúes la siguiente actividad.

 

Actividad Propuesta: ¿Cómo defines la apertura a las nuevas experiencias? ¿Consideras que éste es un rasgo de tu personalidad? ¿Por qué? ¿Qué prácticas propondrías para los individuos que quisieran mejorar esta característica?

Otra característica de las personas creativas se relaciona con su nivel de conocimiento.

Niveles del conocimiento -codificado y tácito-.

Los productos creativos con mayor grado de novedad y valoración, en general, son el resultado del trabajo de personas, en forma individual o grupal, que acumulan un elevado nivel de conocimiento sobre el dominio dentro del que realizan su propuesta. Esto ha dado origen a la frase usual de la necesidad de las “10.000 horas” de aprendizaje, relativas a un área, previas a comenzar a generar aportaciones novedosas y útiles. Si bien para otros autores ese período de aprendizaje debería ser superior (Simonton, D. 2000; Kaufman, S.C. y Kaufman, J.C. 2007). Veamos algunos ejemplos al respecto:

 

  • Conocimiento codificado: el científico inglés Isaac Newton reconoció que sus logros, en gran medida, se derivaron del dilatado conocimiento adquirido a partir del estudio de las investigaciones realizadas por otros científicos. Expresado en la frase: “…Si he logrado ver más lejos es porque me he subido a hombros de  gigantes…”


  • Conocimiento tácito: el filósofo y economista escocés Adam Smith anticipó principios  de innovación abierta en más de dos siglos, al escribir: “…La invención de las máquinas que facilitan y abrevian la tarea, parece tener su origen en la propia división del trabajo. El hombre adquiere una mayor aptitud para descubrir los métodos más idóneos y expeditos, a fin de alcanzar un propósito, cuando tiene puesta toda su atención en un objeto, que no cuando se distrae en una gran variedad de cosas. Debido a la división del trabajo toda su atención se concentra naturalmente en un solo y simple objeto…Una gran parte de las máquinas empleadas en esas manufacturas, en las cuales se halla muy subdividido el trabajo, fueron al principio invento de artesanos comunes, pues hallándose ocupado cada uno de ellos en una operación sencilla, toda su imaginación se concentraba en la búsqueda de métodos rápidos y fáciles para ejecutarla. Quien haya visitado con frecuencia tales manufacturas habrá visto muchas máquinas interesantes inventadas por los mismos obreros, con el fin de facilitar y abreviar la parte que les corresponde de la obra…” Smith, A. (1982, 1776, pp.12-13).

 El conocimiento tácito, relacionado con las experiencias acumuladas, para el ser creativo fue reiterado en época más reciente por el filósofo americano Charles Hartshorne, en su trabajo “La creatividad participada”, donde expresó:

 

  • “…Nosotros compartimos la libertad creadora unos con otros. El contenido de la experiencia presente viene de otras experiencias, las propias de uno mismo desde el nacimiento o más temprano y, aquellas de otras personas, sin contar los animales con los cuales he experimentado, incluyendo nuestras propias células (las cuales son animalitos) y criaturas todavía más alejadas aún de nuestra propia naturaleza. ¿De qué podría valer la creatividad de algún hombre, si su padre y su madre no hubieran contribuido con sus propias y únicas experiencias, si los miles de escritores, compositores, actores, algo de cuya experiencia emocional o intelectual se ha infiltrado en su experiencia, no hubieran logrado sus obras originales o si él no hubiera tenido decenas de miles de conversaciones con personas, cada una de las cuales, en cualquier estado, tenía algo, jamás sentido antes por él, que comunicarle?...”

“…En la obra de Alberto Giacometti, la copia es una actividad constante, tan primera como su formación y tan indispensable como su trabajo a partir del natural. De los cientos de copias inventariadas, Giacometti y el crítico italiano Luigi Carluccio, seleccionaron 144 para el libro ´Le copie dal passato´ (publicación póstuma Turín, Boltero, 1967)…Donde el pintor y escultor expresa: ´En ese preciso momento me veo simultáneamente en todo mi pasado […] todo el arte del pasado, de todas las épocas, de todas las civilizaciones, surge ante mí, todo es simultáneo, como si el espacio ocupara el lugar del tiempo […] los recuerdos de las obras de arte se mezclan con recuerdos afectivos, con mi propio trabajo con toda mi vida´.

El reto de la copia es el de toda la creación de Giacometti: representar la realidad tal como la ve ´se podría pensar que el realismo consiste en copiar…un vaso tal como está encima de la mesa. En realidad, sólo se copia lo que se tiene a cada momento, la imagen que se vuelve conciencia´. Fundación Mapfre. Madrid. España. Sala Recoletos. Exposición: Derain, Balthus, Giacometti. Una amistad entre artistas. 2018.

 

Actividad Propuesta: Supón que te incorporas a una organización en un sector de actividad novedoso para tí. Te solicitan que en un mes propongas un producto creativo ¿Qué técnicas utilizarías en tu trabajo para alcanzar las “10.000 horas” de aprendizaje previo, en sólo un mes, y cumplir el objetivo solicitado?

Con relación al tema del conocimiento tácito, investigaciones que he realizado siguiendo los argumentos de Scitovsky (1976), Goldsmith y Hofacker (1991) y Witt (2001, 2016, 2017), me permiten aseverar que los consumidores especializados en la demanda de determinados bienes -o sea que han acumulado un conocimiento tácito en su consumo- son los que muestran mayor predisposición a la incorporación de nuevos productos en el sector de sus preferencias.

El tercer elemento que caracteriza a las personas creativas es su elevada motivación interna:

Grado de motivación interna.

Como se ha expresado previamente, los procesos creativos no son secuencias lineales, presentan avances y retrocesos, dado que al incursionar en territorios desconocidos las probabilidades de error se incrementan. Esto conlleva a procesos de revisión y rectificación en el desarrollo de la novedad. Los errores, demoras y críticas, si bien esperables, pueden generar frustración en el autor/autores durante el proceso de creación. Por tanto, una de las características de las personas creativas es su resiliencia que derivaría de su elevado nivel de equilibrio psicológico y motivación interna. Al respecto Teresa Amabile (1996) afirma que la probabilidad que una persona sea creativa se incrementa con la interacción de tres factores:

 

  • Conocimiento y experiencia en el  tema.
  • Conocimiento y manejo de algunas de las técnicas de creatividad.
  • Motivación interna que considera más relevante que la motivación externa.

La motivación interna, refleja el deseo de trascender a través de la acción creativa, y la satisfacción personal derivada de la tarea bien realizada, que permiten superar las presiones externas, los cuestionamientos y las posibilidades de fracasar.

 Modelo componencial de Teresa Amabile: Una interpretación.

 

“El papel que desempeña Newton para la Ilustración es comparable al de Darwin para los siglos siguientes”.  Tzvetan Todorov

Charles Darwin, dedicó dos décadas en la redacción del libro: “El origen de las especies”, inaugurando una de las teorías científicas más disruptivas de los últimos siglos. En los párrafos siguientes de su Autobiografía, se pueden apreciar las características citadas de las personalidades creativas: la apertura a las nuevas experiencias, los niveles de conocimiento - codificado y tácito – y el grado de motivación interna.

“… Pienso que soy superior al común de los mortales para percatarme de cosas que no atraen fácilmente la atención y observarlas con cuidado. Mi diligencia en observar y recabar datos ha sido casi todo lo grande que podía ser. Un hecho bastante más importante es que mi amor por la naturaleza ha sido siempre constante y ardiente.

Desde mi primera juventud he experimentado un deseo fortísimo de entender o explicar todo cuanto observaba, es decir, de agrupar todos los datos bajo leyes generales. Todas estas causas unidas me han proporcionado la paciencia para reflexionar o sopesar durante varios años cualquier problema inexplicado. Hasta donde puedo juzgar no estoy hecho para seguir ciegamente la guía de otras personas. Me he esforzado constantemente, por mantener mi mente libre, hasta el punto de abandonar, por más que la apreciara cualquier hipótesis, (y hay que tener en cuenta que no puedo menos de formularlas sobre todo tipo de temas) en cuanto se demostraba que los hechos la contradecían….Mi éxito como hombre de ciencia ha estado determinado, hasta donde me es posible juzgar, por un conjunto complejo y variado de cualidades y condiciones mentales. La más importante ha sido el amor a la ciencia, una paciencia sin límites al reflexionar largamente sobre cualquier asunto, la diligencia en la observación y recogida de datos y una buena dosis de imaginación y sentido común. Es verdaderamente sorprendente que, con capacidades tan modestas como las mías, haya llegado a influir de tal manera y en una medida considerable en las convicciones de los científicos sobre algunos puntos importantes…” p. 120-124

1.2.   Procesos.

Etapas del proceso creativo.

John Dewey, uno de los primeros en tratar los procesos creativos, propone un análisis riguroso de los actos del pensamiento distinguiendo cinco pasos:

"...Tras el examen, cada instancia revela, más o menos claramente, cinco pasos lógicamente distintos: (i) una dificultad sentida; (ii) su ubicación y definición; (iii) sugerencia de posible solución; (iv) desarrollo por razonamiento de los rumbos de la sugerencia; (v) observación adicional y experimento conducente a su aceptación o rechazo. Es decir, la conclusión de creencia o incredulidad..." (Dewey, J.1910).

Graham Wallas presentó en su libro “El arte del pensamiento” (1926) un modelo de proceso creativo con mayor detalle, que ha tenido gran influencia posterior. Sus etapas son:

 

  • Preparación: consiste en la identificación del problema a resolver, la exploración de sus dimensiones y el inicio de la recogida de información potencialmente útil para su solución.
  • Incubación: se trata de la interiorización del problema mediante un proceso  inconsciente que se produce en el cerebro. Se establecen nuevas relaciones, que pueden suponer la desconexión del problema liberando a la mente de una búsqueda consciente de la solución. Durante esta etapa, cuya duración no está determinada, existe una tensión emocional derivada de la incertidumbre respecto al hallazgo de una solución.
  • Intimación: la persona creativa "presiente" que está próxima la solución. En muchas publicaciones, esta etapa no está mencionada por considerarla una sub-etapa dentro de la de Incubación.
  • Iluminación o insight[1]: comienzan a emerger las ideas que acercan la solución. Es una fase de insights e intuiciones, durante cuyo transcurso la idea creativa pasa del procesamiento interior al consciente.
  • Verificación: la idea creativa se verifica conscientemente, se elabora y se aplica al problema planteado.

Esta secuencia de pasos no es en absoluto lineal, se trata de un proceso complejo, donde se  observan continuos avances, retrocesos y retroalimentaciones. Dentro de estas restricciones se plantearán tres fases que podrían seguir los procesos creativos: 

 

  • Una primera etapa de planteamiento del problema.
  • Fase de apertura y búsqueda de soluciones alternativas, etapa de investigación y trabajo, relacionada con el pensamiento divergente o lateral.
  • Etapa de cierre, relacionada con el pensamiento convergente, que consiste en elegir  las propuestas cuyos resultados sean más novedosos y valiosos –además de técnica y presupuestariamente factibles para el estado de la organización en ese momento-.

A continuación se desarrollarán las tres fases de este proceso, presentando en primer lugar el planteamiento del problema, y luego las fases de pensamiento divergente y convergente.

La creatividad como formulación novedosa de problemas.

La investigadora Manuela Romo (2012) explica que la creatividad se caracteriza por ser una forma de pensar que busca problemas -antes que eludirlos- para darles soluciones originales. El proceso de formulación de problemas puede ejecutarse al elaborar preguntas originales, que se pueden iniciar de la siguiente manera: ¿Cómo vamos a hacer para…?

Como consecuencia de la existencia de una situación irresuelta y/o mejorable en cualquier sentido, desde los problemas de deterioro en el medioambiente al hambre en el mundo; hasta el diseño de una nueva colección de ropa, se da origen a un proceso creativo. La “pregunta” inicial que dispara al proceso creativo puede ser la búsqueda de una solución a un problema existente o, más original aún, la de encontrar nuevos problemas.

Según Guilford, la sensibilidad a los problemas sería una característica de la personalidad creativa al respecto explica que: “…las aptitudes creadoras se definen en relación con la solución de problemas. La sensibilidad hacia los problemas es una actitud perceptual general que capacita a los individuos a darse cuenta de lo inusual, de lo raro, de las inconsistencias aparentes. Tal disposición ofrece al individuo numerosos problemas para resolver…” (Guilford, J.P. y Hoepfner, R., 1971). Luego en otra obra además expresa: “…Las consecuencias que para el futuro de la humanidad revisten los esfuerzos actuales y futuros destinados a obtener comprensión y control del rendimiento creativo son incalculables. Es evidente que la solución de muchísimos problemas humanos depende de la educación de la población mundial, tanto extensiva como intensivamente. Un pueblo informado, dotado de aptitudes que le permitan utilizar esa información es un pueblo creativo y capaz de solucionar sus problemas…” J.P. Guilford y otros (1978, p.21)

La acción de iniciar los procesos creativos con el planteamiento de problemas -existentes o nuevos- se aplica a temas científicos, tecnológicos o empresariales, y a los procesos de creatividad artística. En el párrafo siguiente podrás leer las reflexiones de J. Getzel y M.  Csíkszentmihályi (1984) respecto a este tema.  

“…La creatividad implica sensibilidad a tensiones no formuladas previamente y habilidad para expresarlas como problemas que se pueden solucionar…Podríamos por tanto describir la creatividad artística como sigue: es el proceso por el que un individuo, 1) experimenta un conflicto en la percepción, emoción o pensamiento, 2) formula un problema articulando el conflicto previamente inarticulado, 3) expresa el problema de una forma visual, 4) triunfa en la resolución del conflicto a través de significados simbólicos y 5) en consecuencia, logra un nuevo equilibrio cognitivo y emocional…El éxito artístico, en nuestro grupo estuvo más fuertemente relacionado con esta fase del proceso de encontrar problemas, que probablemente se convierta en uno de los temas centrales de la creatividad en general…”

“…Toda actividad creadora de cualquier nivel puede considerarse la solución a un problema...” J. A. Marina y E. Marina (2013). La resolución de problemas se realiza de dos maneras. La primera analógica, que sigue una secuencia estricta de pasos. En segundo lugar la heurística[2] que propone métodos informales inventivos para encontrar la solución. Este tipo de resolución es la que caracteriza a los procesos creativos.

Ahora bien, la heurística consta de dos etapas: el proceso de pensamiento divergente y el proceso de pensamiento convergente.

 

Actividad Propuesta: En primer lugar, propón dos problemas conocidos que necesiten soluciones creativas: uno en tu lugar de trabajo, y el otro en la localidad donde habitas. En segundo término, encuentra dos nuevos problemas que aún no existan ni en tu lugar de trabajo, ni en la localidad donde habitas.

Luego de la fase del planteamiento del problema, se continúa con las etapas del pensamiento divergente –abrir posibilidades- y del pensamiento convergente -cerrar llegando a resultados-.

Pensamiento divergente y convergente.

En el proceso creativo ambos tipos de pensamiento deben actuar conjuntamente. Los métodos creativos buscan desarrollar procesos para solucionar problemas con la siguiente  secuencia: primero apertura de posibilidades, relacionada con el pensamiento divergente. En segundo término cierre con la solución, relacionado con el pensamiento convergente. Fue el psicólogo americano J.P.Guilford quien desarrolló los conceptos de pensamiento divergente y convergente, como aportes a la comprensión de los procesos creativos.

Pensamiento divergente

Es el pensamiento que discrepa, que separa, que busca alternativas o posibilidades diferentes.

Responde al enfoque del problema desde distintas perspectivas, buscando respuestas variadas y alternativas. Este pensamiento está relacionado con la imaginación, es original, inventivo y flexible. Utiliza distintos enfoques y diversos conocimientos posibles.

Los supuestos establecidos son removidos, los esquemas conocidos son desarticulados y las rígidas posturas flexibilizadas.

Estas ideas de J. P. Guilford se asemejan al pensamiento productivo de M. Wertheimer y al pensamiento lateral de E. De Bono, o el denominado “fuera de la caja”.

Pensamiento convergente

Es muy útil para resolver problemas claramente definidos, con una única solución correcta, p.ej.:

2 + 2 =

Otra forma de ejemplificarlo es a través de preguntas de respuestas múltiples donde una sola es verdadera.

Estos problemas tienen límites bien definidos, son universos cerrados con elementos conocidos desde el inicio y que no van a cambiar con el desarrollo de la búsqueda de soluciones. Su resolución sigue una secuencia lógica como una trayectoria lineal.

Este pensamiento va a ser el que seleccione entre todas las alternativas diferentes generadas por el pensamiento divergente cuál debe utilizarse finalmente para dar solución al problema inicial.

 

1.3.   Plazas.

La tercera “P” de la creatividad, se refiere al lugar/es donde la podemos desarrollar.

Entornos favorables a la creatividad.

Definimos plaza como el entorno en el cual se desarrollan nuestros diferentes tipos de actividades. En particular nos referiremos a dos tipos de ámbitos: las organizaciones en las que desempeñamos nuestra labor profesional y las ciudades en que habitamos. Existen otros entornos, como el ámbito familiar, el educativo, el virtual, etc. con gran influencia sobre nuestro desarrollo creativo, pero cuyo tratamiento excede el marco del curso.

Organizaciones creativas.

En términos de organizaciones, éstas han evolucionado desde estructuras cerradas, verticales y autoritarias hacia formas más abiertas, democráticas, participativas y en red. Los sistemas productivos actuales demandan mano de obra con niveles de capacitación cada vez mayores. La gestión de este capital humano requiere del diálogo fluido, pues no se demanda su fuerza física, sino sus conocimientos. Aún así, en la mayoría de las organizaciones no se evidencian las mejores condiciones para la participación creativa de todos sus miembros. El conflicto entre los poderes, el temor al fracaso y la cultura de la crítica persisten como dominantes.

Los resultados exitosos de las empresas más creativas, presionarían a las restantes organizaciones a modificar sus estructuras para insertarse activamente en los mercados donde la tasa de cambio es crecientemente creciente[3].

Por otra parte, existen muchos sectores productivos con un menor ratio de variación tecnológica que postergan la inclusión de los planes de creatividad.

Se debe destacar que las organizaciones creativas son aquellas que saben mantener la coordinación, productividad y control en un ambiente dinámico que impulsa los procesos de innovación. Los beneficios obtenidos no sólo se derivan de los nuevos productos lanzados al mercado y de los procesos innovadores puestos en marcha, sino además de la mayor motivación e identificación de sus empleados con los objetivos de la institución.  

 

El segundo ámbito que se va a analizar se refiere a las características de las zonas urbanas que favorecen la creatividad.

 

Ciudades creativas.

En las economías desarrolladas los recursos naturales y el capital físico han perdido  importancia relativa frente a la participación del capital humano como factor dinámico del crecimiento económico. Este es el planteamiento de la economía creativa cuyas características son: “…I) centra su atención en el potencial de la creatividad humana como recurso generador de riqueza…y II) está constituida por la productividad generada por las grandes, medianas y pequeñas industrias culturales y creativas, así como por áreas de la productividad no industrial como las bellas artes o las artesanías, entre muchas otras…” Herrera Molina, E.; Bonilla-Estávez, H. y Molina-Prieto, L.F. (2013).

 

“…Las industrias culturales y creativas conforman uno de los más importantes segmentos dentro del campo de las ´innovaciones ocultas´ (Miles & Green, 2008). Esto es, actividades innovadoras que no son detectadas ni medidas por los indicadores habituales y que se encuentran al margen de las políticas de innovación en los diferentes países en los que éstas se formulan, pero que en diferentes contextos, especialmente en las grandes aglomeraciones urbanas, pueden llegar a superar en dimensión y aportación económica a las innovaciones tecnológicas que proceden de la investigación científica y el desarrollo tecnológico…” (Gallarraga Ezponda, A., Luna García, A., González Durán, S., 2013, p.39)

A continuación presentaremos las definiciones de economía e industrias creativas, según la UNCTAD (2010).

 La "economía creativa" es un concepto en evolución basado en la existencia de activos creativos, con potencialidad para generar crecimiento económico y desarrollo:

 

  • Puede fomentar la generación de ingresos, la creación de empleo y las ganancias de exportación al tiempo que promueve la inclusión social, la diversidad cultural y el desarrollo.
  • Abarca aspectos económicos, culturales y sociales que interactúan con objetivos de tecnología, propiedad intelectual y turismo.
  • Es un conjunto de actividades económicas basadas en el conocimiento con enlaces transversales, a nivel macro y micro, con toda la economía en general.
  • Es una opción de desarrollo factible que exige respuestas políticas innovadoras, multidisciplinarias y la acción interministerial.
  • En el corazón de la economía creativa están las industrias creativas.

Las industrias creativas se caracterizan por:

 Son los ciclos de creación, producción y distribución de bienes y servicios que usan la creatividad y el capital intelectual como materias primas.

  • Constituyen un conjunto de actividades basadas en el conocimiento, pero no limitadas a las artes, con potencialidad de generar ingresos derivados del comercio y de los derechos de propiedad intelectuales.
  • Incluyen productos tangibles e intangibles, intelectuales, o artísticos, servicios con contenido creativo, valor económico y objetivos de mercado.
  • Se sitúan en la encrucijada de los sectores artesanal, de servicios e industrial.
  • Constituyen un nuevo sector dinámico en el comercio mundial.

 Dentro de las industrias creativas se pueden citar:

Música en vivo, teatro, danza, ópera, circo, títeres. Actividades relacionadas con la pintura, la escultura y la fotografía. Sitios arqueológicos, museos, bibliotecas, exposiciones. Expresiones culturales tradicionales.

Producción de películas, televisión, radio. Publicación de medios impresos. Industria del diseño –gráfico, de moda, de joyas, interior-. Servicios creativos: arquitectónicos, de publicidad, I+D-Industria digital, software, videojuegos, contenidos creativos.

 Dentro de las economías desarrolladas, dichas industrias, mantienen una tendencia de crecimiento positivo y de mayor demanda de mano de obra especializada. La movilidad de este factor productivo es muy elevada, los individuos pueden seleccionar la ciudad donde ejercer su profesión. Asimismo, las ciudades pueden desarrollar políticas para generar entornos más atractivos y captar a este tipo de industrias. A partir de los trabajos de R. Florida se han analizado qué ciudades generan un entorno más atractivo para la economía creativa. Al respecto se elaboraron indicadores, entre los que destaca el de las “tres T”.

 Las ciudades más creativas son aquellas que muestran elevados índices de Talento, Tecnología y Tolerancia.

Las características de los entornos desde el nivel nuclear, organizacional y social evidencian el impacto que tendrá sobre el grado de creatividad de los individuos que pertenecen a ellos.

Te proponemos la lectura del artículo “Ciudades Creativas” de Herrera Molina, E.; Bonilla-Estávez, H. y Molina-Prieto, L.F. (2013). En base a los conceptos explicados,  puedes realizar la siguiente actividad:

 

Actividad Propuesta: Cita las tres ciudades que consideras más creativas. ¿Qué características destacan para categorizarlas de este modo? Si proyectaras emprender la producción de robots para el cuidado de las personas ¿Qué ciudad considerarías más creativa para desarrollar ese emprendimiento? ¿Por qué?

 

1.4.   Productos.

 

Características y niveles.

Como hemos explicado en la definición de creatividad, los procesos creativos entendidos como la capacidad para producir algo -sea de la naturaleza que sea- deben concluir en un resultado: un objeto físico, una teoría científica, una propuesta tecnológica, una obra de arte, etc.

Los productos creativos deben reunir dos condiciones necesarias: ser novedosos y valiosos. Un producto novedoso es difícil de predecir y repetir, por tanto se diferencia marcadamente de los existentes en el mercado, y provoca sorpresa entre los potenciales demandantes.

El producto creativo, además debe cumplir la condición de ser valioso en cuanto a su función como respuesta a una preocupación de un individuo, organización, o de la sociedad. Dicha utilidad, presenta una escala de grados, desde un mínimo hasta la total satisfacción como respuesta al problema planteado.

Veamos a continuación distintas propuestas para medir la dimensión creativa del producto.

Margaret Boden en su libro “The creative Mind” (1990) diferencia entre:

  • La P-creatividad o creatividad psicológica, su influencia está circunscripta a la cotidianeidad y entorno inmediato de una persona. Implica el surgimiento de una idea sorprendente y valiosa que es nueva para la persona que la tiene, sin importar cuántas  la hayan podido tener antes.
  • La H-creatividad o creatividad histórica, produce cambios en nuestra cultura, podemos decir que la idea es nueva para la humanidad. Es una idea que ninguna persona ha tenido antes o, al menos, no se tiene constancia de esto. Se considera un caso particular de la P-creatividad.

Mihály Csíkszentmihályi propone que la creatividad se origina como resultado de la interacción entre el pensamiento de un individuo dentro de un ámbito sociocultural. El autor identifica tres componentes participantes en el proceso: el dominio, la persona y el ámbito, definidos como:

  • Dominio o cultura que es el conjunto de reglas simbólicas.
  • Persona, que aporta una novedad al campo simbólico.
  • Ambito, o conjunto de expertos que analizan y validan la idea creativa.

De esta forma realiza una diferenciación entre la creatividad con c minúscula y la Creatividad con C mayúscula [4].

  • La c-creatividad, se expresa en hechos cotidianos y es a la que se refiere la psicología cuando una persona genera un producto –en el sentido amplio- que es útil y novedoso en su ámbito más próximo. Por tanto al no modificar un dominio, no requiere la valoración del ámbito.
  • La C-Creatividad, es la que genera un aporte significativo en un dominio –entorno-, y que constituye una evolución cultural al considerar a ese aporte como un cambio a los memes existentes en la cultura, pasando a integrar éste un nuevo meme. Dado que el cambio en los memes de una cultura excede ampliamente el espacio individual requiere su validación por parte de los expertos –ámbito- en dicho dominio.

La valoración del nivel de novedad de los resultados creativos, según M. Csíkszentmihályi, se   realiza dentro del ámbito de los expertos. Un individuo -o grupo de individuos, p.ej. equipo de investigación científica, grupo de creatividad organizacional-,  genera una propuesta creativa en un determinado dominio -p.ej. en neuroeconomía, o en tallas de madera-, dentro de ese dominio existe un ámbito de expertos -desde academias de ciencias, hasta críticos de arte- que analizan el grado de novedad y valor que presenta dicho producto creativo. Un producto será creativo cuando obtenga un reconocimiento por parte de la sociedad como producto valioso, en tanto esto no ocurra sólo será un producto original.

 


Csikszentmihalyi explica que: “…Si por creatividad entendemos una idea o acción que es nueva y valio­sa, no podemos aceptar sin más el relato de una per­sona como criterio de su existencia. No hay manera de saber si un pensamiento es nuevo si no es por re­ferencia a algunos criterios, y no es posible decir si es valioso hasta que pasa la evaluación social. Por tanto, la creatividad no se produce dentro de la cabeza de las personas, sino en la interacción entre los pensamientos de una persona y un contexto sociocultural. Es un fenómeno sistémico, más que individual…”. (Csi­kszentmihalyi, 1998, p.42).

Cuando una empresa crea un nuevo producto ¿quiénes son los expertos que determinan su novedad y valor?

En el video que se adjunta debajo, se presentan una serie de diez nuevos  productos. Luego de su visualización, te propongo una nueva actividad.

https://www.youtube.com/watch?v=SLhBmPsnSi4&t=1s

 

Actividad Propuesta: ¿Consideras que alguno de los productos presentados en el vídeo podría convertirse en una innovación exitosa de mercado? En caso afirmativo ¿Cuál/es? ¿Por qué?



[1] El “insight” es una de las etapas más complejas para ser explicadas. Distintas escuelas psicológicas la han estudiado y relacionado con el término ¡Eureka! Expresado por Arquímedes.  Las investigaciones en psicología tienden a demostrar que esta fase de iluminación no tiene componentes “mágicos”, sino que es la aparición súbita de la idea creativa, como resultado de un extenso trabajo previo. Como el del propio Arquímedes: “…Requería Herón II, rey de Siracusa y pariente de Arquímedes (287 a.C.-212 a.C.), saber si la corona encargada al orfebre local era realmente de oro puro. Advirtió el rey a Arquímedes, expresamente, que no dañase la corona. Arquímedes dio varios rodeos al problema, hasta que un día, al meterse en la bañera, vino a solucionar el asunto. De acuerdo con lo percibido, pensó que el agua que se desbordaba tenía que ser igual al volumen de su cuerpo en ella sumergido, por lo que, trasladando el asunto a la corona de Herón, si medía el agua que rebosaba al meter la corona, accedería a saber el volumen de ésta, y acto seguido, podría compararlo con el volumen de un objeto de oro que pesase igual que la corona. Si los volúmenes no fuesen iguales, sería la prueba de que la corona no era de oro puro. Excitadísimo por el descubrimiento, salió del baño y corriendo desnudo, a palacio, gritaba: ¡Lo encontré! ¡Lo encontré! En griego eurhka (Eureka) pasa a la posteridad como la expresión que anuncia el descubrimiento. Arquímedes logró demostrar que la corona tenía mayor volumen que un objeto de oro con el mismo peso, contenía plata, un metal de menor densidad que el oro…” Max Wertheimer, lección dada en 1924 en la Sociedad Kantiana de Berlín.

[2] Heurística: “…es un término que procede de la misma raíz que ¡Eureka! ¡lo encontré!...” Marina, J.A. y Marina, E. (2013).

[3] En una entrevista realizada a Manuela Romo, se le ha formulado la siguiente pregunta: ¿Es posible aplicar sistemáticamente la creatividad a los procesos de creación de valor en la empresa?

No solo es posible y se puede, sino que se debe. Estamos en la era del conocimiento y, con lo que acabo de decir, se comprende que innovación y creatividad son valores emergentes, cuya necesidad es casi cuestión de supervivencia. En el mundo que vivimos, donde los cambios son vertiginosos y globales, la sociedad, desde la educación, debe potenciar mentes abiertas a la novedad, críticas, flexibles para encarar los cambios y productivas para aportar asimismo, novedad y cambio.

Pero, como tú dices en la pregunta, la aplicación ha de ser sistemática. No basta con un curso de fín de semana, más o menos lúdico, donde nos ponemos gorros para pensar de diferentes maneras,... La gestión de la innovación supone un cambio mucho más profundo, requiere estructuras horizontales, no jerarquizadas donde la información fluye libremente, equipos multidisciplinares que faciliten enfoques diversos y nuevos puntos de vista, amén de otros cambios de más calado en las organizaciones, como perder el miedo a la innovación, lo cual significa -es cierto- riesgo, incertidumbre, azar, caos, crisis,... pero necesarios para innovar y mejorar en procesos, productos, servicios y clima laboral.

La creatividad en la empresa, igual que en el centro educativo no se dará mientras no se cumplan dos principios fundamentales: libertad y seguridad psicológicas. La primera para que la persona no se coarte a la hora de proponer sugerencias, ideas o plantear problemas y, la segunda, para tener la confianza suficiente que garantice esa libertad de pensamiento sin que ello implique consecuencias negativas en el plano personal o laboral. Cada vez hay más ejemplos de empresas que suscriben estos principios. incrementando, con ello, su competitividad. Entrevista a Manuela Romo Revista Madri+d Nº 27. https://www.madrimasd.org/revista/revista27/quien/quien_es_quien2.asp

[4] Derivado de este modelo se han generado otras variantes. Por ejemplo el modelo de las Cuatro “C” de la creatividad que se inicia con la “mini c”, la cual es la aplicación creativa en un dominio específico de los nuevos conocimientos adquiridos. P.ej: en clase de dibujo enseñan la técnica del sombreado. Se solicita realizar como tarea un dibujo aplicando ese nuevo conocimiento. Este trabajo creativo es una “mini c”. Los posteriores dibujos que realice en casa mejorando esta técnica se hallarán en el ámbito de “c chica”. Si con el tiempo la persona se transforma en un pintor profesional, podrá llegar a la “C profesional”. Finalmente la “C” se verifica sólo cuando el aporte genera un cambio en el campo de esa especialidad, como Cézanne en el arte moderno. Helfand, M.; Kaufman, J C.; Beghetto, R. A. (2016). Otra alternativa es la Creatividad radical e incremental (Madjar, N., Greenberg, E. y Chen, Z., 2011): La radical se relacionaría más con la motivación interna, con la formulación del problema, con la etapa del proceso creativo del pensamiento divergente, abrir alternativas; basada en las teorías abstractas, las fuentes están fuera del ámbito propio aportando analogías más novedosas. Mientras la creatividad incremental estaría centrada en la motivación externa, en la etapa del proceso creativo de encontrar soluciones; el uso del pensamiento convergente, el cerrar  eligiendo la alternativa correcta como solución al problema.